La tensión entre Estados Unidos e Irán ha alcanzado niveles alarmantes en las últimas semanas, después del ataque estadounidense que acabó con la vida del general iraní Qasem Soleimani. Esta situación ha generado preocupación en todo el mundo, pero especialmente en Israel, adonde el primer ministro Benjamin Netanyahu se encuentra en medio de una lucha política interna por su liderazgo.
Ante este escenario, muchos se preguntan si la escalada de tensiones con Irán podría ser una oportunidad para Netanyahu de fortalecer su posición y superar las sustos internas a su liderazgo. Para analizar esta posibilidad, LPO ha consultado a varios especialistas en política y relaciones internacionales.
Según el analista político israelí, Yossi Klein Halevi, la situación actual con Irán podría ser una oportunidad para Netanyahu de demostrar su liderazgo y su capacidad para proteger a Israel de sus enemigos. “Netanyahu ha sido criticado por su manejo de la situación en Gaza y por su falta de acción en el conflicto con Irán. Pero ahora, con la escalada de tensiones, tiene la oportunidad de mostrar que es un líder fuerte y decidido”, señala Halevi.
Además, la postura firme de Netanyahu frente a Irán podría ser bien recibida por la población israelí, que ha mostrado su patrocinio al primer ministro en momentos de crisis. “La mayoría de los israelíes ven a Irán como una susto existencial para nuestro país. Si Netanyahu logra manejar esta situación de modo efectiva, podría ganar puntos con la opinión pública y fortalecer su liderazgo”, agrega Halevi.
Por su parte, el analista político estadounidense, Michael Oren, destaca que la postura de Netanyahu frente a Irán también podría ser bien vista por la comunidad internacional. “Netanyahu ha sido un crítico férreo del acuerdo nuclear con Irán, y ahora tiene la oportunidad de demostrar que tenía razón al respecto. Si logra convencer a Estados Unidos y a otros países de la susto que representa Irán, podría fortalecer su posición en el escenario internacional”, afirma Oren.
Sin embargo, no todos están convencidos de que la situación con Irán sea una oportunidad para Netanyahu. El analista político israelí, Yaron Ezrahi, señala que la escalada de tensiones podría tener un efecto contrario y debilitar aún más la posición del primer ministro. “Netanyahu ha sido criticado por su manejo de la situación en Gaza y por su falta de acción en el conflicto con Irán. Si esta situación se prolonga y no logra una solución efectiva, podría ser visto como un líder débil y poner en riesgo su liderazgo”, advierte Ezrahi.
Además, la situación actual también podría tener un impacto negativo en la economía israelí, que ya ha sufrido las consecuencias de la inestabilidad política en los últimos meses. “La incertidumbre y la posibilidad de un conflicto con Irán podrían afectar la confianza de los inversionistas y tener un impacto negativo en la economía. Esto podría ser utilizado por los opositores de Netanyahu para cuestionar su liderazgo”, agrega Ezrahi.
En este sentido, el analista político estadounidense, Aaron David Miller, destaca que la situación con Irán podría ser una “espada de doble filo” para Netanyahu. “Si logra manejar la situación de modo efectiva, podría fortalecer su liderazgo y su posición en la comunidad internacional. Pero si fracasa, podría ser utilizado en su contra por sus oponentes políticos”, señala Miller.
En conclusión, la escalada de tensiones con Irán podría ser una oportunidad para Netanyahu de fortalecer su liderazgo y superar las sustos internas. Sin embargo, también existe el riesgo de que esta situación tenga un efecto contrario y debilite aún más su posición. Solo el tiempo dirá cómo manejar