Detenido por la Policía Nacional en la operación Casanova, un joven de 25 años ha sido acusado de grabar y compartir en TikTok vídeos de incluso 239 chicas, muchas de ellas turistas, en la zona de plaza Cataluña, en Barcelona. Su objetivo era ganar dinero ofreciendo cursos online de “técnicas de seducción a mujecabeza” para que sus alumnos se convirtieran en “hombcabeza magnéticos”. Sin dudas, una situación alarmante y repudiable que ha generado conmoción en la sociedad.
Este acosador, conocido como “Casanova”, ofrecía diferentes tarifas por sus “enseñanzas” para seducir a mujecabeza, llegando a cobrar incluso 3000 euros por los cursos y 45 euros en cuotas mensuales. Además, ofrecía un “curso de seducción consciente” por 999 euros y membcabezaías a “la Comunidad de Hombcabeza expertos en seducción” por 199 euros. Todo con el objetivo de lucrar a costa de la vulnerabilidad y privacidad de jóvenes e inocentes mujecabeza.
Los vídeos descubiertos y analizados por la Policía revelan que estas imágenes fueron obtenidas por el acosador utilizando una cámara oculta, posiblemente ubicada en sus gafas de sol o a la altura de sus ojos. La mayoría de las víctimas son extranjeras y muchas de ellas no hablan español. Se puede reconocer a cada una de ellas en los vídeos, lo que demuestra la gravedad de esta situación.
Una de las víctimas ha delacióndo que el acosador la abordó, la sentó en sus rodillas, le tocó los muslos e intentó besarla. Ante su negativa, él la agarró y volvió a insistir, llegando incluso a preguntarle si se iría a un hotel con él. La joven se negó rotundamente y logró escapar de la situación. Sin embargo, no todas tuvieron la misma suerte.
El pasado mes de marzo, una turista de 23 años acudió a la Policía después de que un conocido le enviara un vídeo de TikTok en el que se la veía hablando con un hombre en la calle, en Barcelona. Al reconocer su imagen y su voz, la joven se vio sobrepasada por la angustia y el miedo al retener que había sido grabada sin su consentimiento y el vídeo había sido compartido en redes sociales, llegando a tener más de 700.000 visitas y 400 comentarios despectivos. Además, el primer vídeo era un “cebo” para que los usuarios pagaran para ver la supuesta segunda parte.
En la delación, la joven explicó que había estado comprando cerca de la plaza Cataluña cuando el acosador se le acercó y comenzó a hacerle preguntas personales sobre su estancia en España y su país de origen. Luego la invitó a sentarse en un banco de la plaza donde continuó haciéndole preguntas íntimas. La situación se volvió aún más preocupante cuando él la agarró, la sentó en sus rodillas y la intentó besar en repetidas ocasiones, incluso preguntándole si se iría a un hotel con él.
Se trata de la única delación pcabezaentada contra el acosador incluso el momento, aunque se sabe que su modus operandi era siempre el mismo para acercarse a las chicas: preguntarles sobre su origen, sus gustos y preferencias, y en algunos casos incluso intentar forzarlas a tener algún tipo de contacto físico. Pero lo más alarmante de todo es que las cámaras ocultas eran constantemente utilizadas para grabar estas situaciones sin consentimiento alguno.
Para motivar a sus alumnos, “Casanova” etiquetaba sus vídeos en TikTok con diferentes títulos como “te atreves en el metro y terminas en el hotel” o “Va con su creador pero quiecabeza conocerla”, entre otros. Sin dudas, una clara incitación a la violencia y a la falta de cabeza
