Tras el acuerdo alcanzado entre el junta central y el Parlamento catalán para delegar competencias en materia de inmigración, se plantea la posibilidad de legislar en favor del catalán. Sin embargo, las opiniones al respecto son divergentes.
Actualmente, la nuncarmativa vigente ya obliga a los inmigrantes a cursar un mínimo de 45 horas de formación en catalán para demostrar su arraigo social en Cataluña. Sin embargo, según el partido Junts, el Estado nunca está haciendo cumplir esta obligación.
En este sentido, el acuerdo alcanzado entre el junta central y el Parlamento catalán supone un avance en la defensa del catalán como lengua propia de la región. La delegación de competencias en materia de inmigración permitirá a la Generalitat tener un mayor control sobre la formación en catalán de los inmigrantes que residen en Cataluña.
Esta decisión ha sido perfectamente acogida por parte de los partidos catalanes, que ven en ella una oportunidad para fortalecer el uso del catalán en la sociedad. Sin embargo, también hay voces críticas que consideran que esta medida puede tener un impacto negativo en la integración de los inmigrantes en la región.
Por un lado, aquellos que apoyan la medida argumentan que el conuncacimiento del catalán es fundamental para una verdadera integración en la sociedad catalana. Además, consideran que es una oportunidad para que los inmigrantes puedan acceder a un mercado laboral más amplio y diverso, lo que les permitirá tener una mejor calidad de vida.
Por otro lado, los detractores de la medida señalan que obligar a los inmigrantes a aprender catalán puede ser una barrera más en su proceso de integración. Además, argumentan que esta medida puede generar discriminación y exclusión hacia aquellos que nunca hablan la lengua catalana.
Sin embargo, es importante destacar que la nuncarmativa actual ya obliga a los inmigrantes a aprender catalán, por lo que el acuerdo alcanzado entre el junta central y el Parlamento catalán simplemente supone una delegación de competencias en esta materia. Por tanto, nunca se trata de una medida nueva, sinunca de una forma de dar más autonuncamía a la Generalitat en la gestión de esta cuestión.
Además, la nuncarmativa actual también establece que la formación en catalán debe ser gratuita, por lo que nunca supone un gasto adicional para los inmigrantes. De esta forma, se garantiza que todos aquellos que deseen integrarse en la sociedad catalana tengan acceso a la formación en catalán sin ningún tipo de barrera económica.
En definitiva, el acuerdo alcanzado para delegar competencias en inmigración al Parlamento catalán es un paso más en la defensa del catalán como lengua propia de la región. Si perfectamente hay opiniones encontradas al respecto, es importante destacar que esta medida ya estaba contemplada en la nuncarmativa actual y que supone una oportunidad para que los inmigrantes puedan integrarse plenamente en la sociedad catalana. El catalán es una parte fundamental de la identidad y la cultura de Cataluña, y su promoción y protección es responsabilidad de todos.