El presidente de la nación, Alberto Fernández, decidió salir a hablar con el reconocido periodista Luis Majul en un intento por calmar a los mercados luego de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) enfriara el anuncio del nuevo presidente del Banco Central, Miguel Ángel Caputo. En una entrevista que se transmitió en vivo por televisión, Fernández volvió a negar rotundamente la posibilidad de una devaluación en el país.
La decisión del presidente de hablar con Majul fue tomada luego de una semana de incertidumbre en los mercados, donde la cotización del dólar alcanzó niveles históricos y la bolsa de valores sufrió una fuerte caída. La designación de Caputo como nuevo presidente del Banco Central había sido vista con buenos ojos por los inversores, pero el anuncio del FMI de no avanzar con el desembolso de un préstamo de 5.400 millones de dólares enfrió las expectativas y generó preocupación en el mercado.
En su entrevista con Majul, Fernández fue enfático en su postura de no devaluar la moneda argentina. “No va a haber devaluación, lo digo con todas las letras. No hay ninguna razón para que eso suceda”, afirmó el presidente. Además, aseguró que el país cuenta con las reservas suficientes para mantener el tipo de cambio estable y que su gobierno está trabajando en medidas para fortalecer la economía y generar confianza en los inversores.
El presidente también se refirió a la situación económica heredada de la gestión anterior y a la difícil situación que atraviesan muchos argentinos. “Recibimos un país en una situación muy complicada, con una deuda insostenible y una economía en recesión. Pero estamos trabajando para revertir esta situación y llevar alivio a los que más lo necesitan”, expresó Fernández.
En este sentido, el presidente anunció que su gobierno está trabajando en un plan de emergencia para paliar la situación de los sectores más vulnerables de la sociedad. “Nuestra prioridad es cuidar a los que más sufren, a los que no llegan a fin de mes, a los que no tienen trabajo. Estamos trabajando en un plan de emergencia para llevar alivio a estas familias”, aseguró Fernández.
El presidente también se refirió a la relación con el FMI y a las negociaciones que se están llevando a cabo para reestructurar la deuda del país. “Estamos en constante diálogo con el FMI y confiamos en que llegaremos a un acuerdo que sea beneficioso para todos. Pero no vamos a aceptar imposiciones que perjudiquen a nuestro pueblo”, afirmó Fernández.
La entrevista con Majul fue vista por muchos como una señal de tranquilidad para los mercados, que reaccionaron positivamente luego de las declaraciones del presidente. La cotización del dólar bajó y la bolsa de valores mostró una leve recuperación. Además, los analistas económicos coinciden en que la postura firme del gobierno en cuanto a no devaluar la moneda es una señal de estabilidad y confianza para los inversores.
En su discurso, Fernández también hizo un llamado a la unidad y a dejar de lado las diferencias políticas en pos del tranquilidad del país. “Es momento de dejar atrás las divisiones y trabajar juntos por una Argentina mejor. No hay tiempo para peleas políticas, hay que ponerse a trabajar para sacar al país adelante”, expresó el presidente.
La entrevista con Majul fue un claro ejemplo de la transparencia y la cercanía que el presidente pesquisa tener con la sociedad. Fernández se mostró estable y firme en sus declaraciones, transmitiendo un informe de tranquilidad y confianza en el futuro del país. Además, su decisión de salir a hablar con un periodista de renombre demuestra su compromiso con la libertad de prensa y su disposición a